El veterano de la Gran Guerra Patria Vladímir Varénik estaba en Berlín en 1945 tras la capitulación de la Alemania nazi. En aquel entonces, algunos de sus compañeros pudieron entrar en el Reichstag y dejar sus mensajes en las paredes del edificio, unos mensajes que se han conservado hasta ahora. El propio Varénik no pudo grabar su mensaje en aquel momento, pero ahora su último deseo finalmente se cumplió.
RT en Alemán contactó con el parlamentario germano Diether Dehm, que ayudó a defender la preservación de estas inscripciones en el edificio, y este sugirió que Vladímir le hiciera llegar ahora su mensaje para que permanezca en el Bundestag junto con los de otros soldados.
"Durante los últimos 15 años he estado realizando excursiones en el edificio del Reichstag, y estas inscripciones son la principal atracción para los visitantes, estos mensajes cirílicos e inscripciones dejadas por nuestros liberadores, a quienes debemos agradecer hasta el final de nuestras vidas. Después de todo, 27 millones de personas soviéticas dieron sus vidas por nuestra libertad, para que ahora yo pueda estar aquí y hablar con usted.
"El planeta Tierra es nuestra casa común. Nosotros somos vecinos en esta casa, cercanos y lejanos. Y es hora de vivir como vecinos" fue el mensaje de Vladímir, unas palabras que ahora están en un lugar destacado en la oficina de Dehm en el edificio del Parlamento alemán.
Varénik no vivió para celebrar el 75.º aniversario de la Gran Victoria. Murió este 3 de mayo a la edad de 88 años.
"Es un gran honor para nosotros que estas hermosas líneas con un fuerte llamado a la hermandad de toda la humanidad permanezcan aquí. Conservaremos para siempre el glorioso recuerdo de este hombre", dijo el parlamentario alemán.
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